Tener Wat Arum en remodelación no impidió disfrutar el día en Chinatown y los canales de Chao Phraya, además de probar el famoso mango sticky rice.
Día 2: Llegada a la caótica Bangkok.
Llegar a nuestro hostal fué mas complicado de lo que pensamos, y aprendimos a regatear en pocos minutos.